El gobierno argentino aseguró este jueves que intentará tratar en la Cámara de Diputados el paquete fiscal, que tuvo que retirar de la ‘ley ómnibus’ por la presión de gobernadores y de la «oposición amigable», una vez que se apruebe el controvertido proyecto legislativo.
«Tenemos el compromiso de tratar el paquete fiscal que hemos retirado de la ley una vez terminado el debate y que haya sido aprobada.
No va a ser tratado por partes sino todo en su conjunto», afirmó el vocero presidencial, Manuel Adorni, en su habitual conferencia de prensa en Casa Rosada.
El retiro del «capítulo fiscal» ocurre en medio de la tensiones entre el gobierno de Milei y los gobernadores de las provincias, a los que el mandatario libertario amenazó con recortes si no se aprueba el paquete de leyes que modifican cientos de normativas para desregular la economía.
Ese capítulo fiscal incluía, entre otros aspectos, el blanqueo de capitales (regularizar hasta 100.000 dólares en efectivo, inmuebles o criptomonedas sin pagar impuestos), el cambio de la fórmula jubilatoria, una moratoria impositiva, un adelanto del impuesto sobre los bienes personales y el incremento de los derechos de exportación.
La conocida como ‘ley omnibus’, titulada en realidad ‘Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos’, es uno de los proyectos centrales del agresivo plan de ajuste de Milei.
Con ella, busca transformar por completo el funcionamiento del país en términos políticos, económicos y sociales y reducir la presencia del Estado.
El debate se reanuda este jueves, después de la tensa sesión del miércoles, de más de 10 horas, en la que hubo forcejeos y conatos de disturbio entre los manifestantes que rechazan el proyecto y las fuerzas de seguridad, que acordonaron el recinto.
Desde su presentación a finales de diciembre, la ‘ley ómnibus’ ha sufrido cientos de modificaciones, pese a que en un inicio el Gobierno, que está en minoría en la Cámara, aseguró que no cambiaría ni cedería ni negociaría nada.