La unidad, es la clave del éxito
En el sentir popular dominicano, en especial en la zona rural , sin importar la región, siempre se ha sostenido que de “cualquiera yagua sale tremendo alacrán”, lo que quiere deja en claro que cualquier rival sin mucha potencialidad para alcanzar el podio, puede producir una sorpresa jamás imaginada.
Sin embargo, esa posibilidad se hace prácticamente imposible cuando se trabaja sobre la bases de una planificación, que no deje cabos sueltos a improvisaciones.
Esas fallas han sucedido en más de una ocasión, en las participaciones del país en Clásicos Mundiales de Béisbol, todo producto de las improvisaciones.
En cada conformación de la selección se ha vendido la creencia, y la mayoría la ha comprado, de superioridad, y podría ser cierto, si comparamos hombre por hombre a los componentes de los equipos que compiten, empero, en béisbol no hay nada escrito, y a diferencia de otros deportes., las sorpresas están al doblar la esquina.
Teniendo en cuenta las experiencias, muchas veces con visos de frustración, se hace necesario trabajar desde ya con todo el rigor que conlleva un evento de esa naturaleza.
El equipo técnico designado para estar en el próximo Clásico tiene la capacidad y experiencia acumulada para no fallar.
De ahora en adelante, la labor los veteranos técnicos, debe centrarse en captar a la mayor cantidad de jugadores estelares que militan en Grandes Ligas, para que se comprometan a representar nos, y para que luego, como siempre se da, que se desmontan por cualquier “quitame esa paja”.
República Dominicana, en el próximo Clásico Mundial de Béisbol 2026, debe dar muestras de unidad de sus jugadores y técnicos.