El Liverpool es un equipo que ha logrado algo impensado en el fútbol inglés porque consiguió disputar todos los partidos que tenía disponible jugar con posibilidad de ganar cada competencia. No solo llegaron a la final de la Champions League, sino que también deberán jugar la final de la FA Cup contra el Chelsea y en la Premier League apenas se encuentran a 3 puntos del Manchester City con apenas 6 en juego; y por supuesto, ya levantaron el trofeo de la Carabao Cup. Y lo sorprendente de esta hazaña no es que van a terminar la temporada con 62 partidos disputados, sino que lo hicieron a un nivel increíble.
Porque esta es la cuestión que conlleva más dificultad, conseguir una regularidad tan grande. Más teniendo en cuenta que en la Premier League solamente se permiten hacer 3 cambios, no 5 como en el resto de competencias. Y dentro de esta consistencia del Liverpool, Mohamed Salah se convirtió en el jugador más regular de la temporada. El egipcio está promediando uno de sus mejores cursos ya que convirtió 30 goles y repartió 15 asistencias en 48 partidos disputados, siendo el actual goleador de la Premier League.
Claramente estos números quedarán en el olvido si no logra coronar la temporada con la obtención de su segunda Champions League y el futbolista lo toma de esta manera. Y justamente, fue el propio Mohamed Salah que, cuando le entregaron el premio al mejor jugador del mundo de la FWA, se refirió al Real Madrid: «Recuerdo la última final contra el Real Madrid como si fuera ayer. Ahora llegamos bien preparados y espero poder hacerlo, vengarnos en la próxima final».
Además, el egipcio también habló de su estatus dentro de la élite de Europa: «Si me comparas con cualquier jugador en mi posición, no solo en mi equipo sino en todo el mundo, verás que soy el mejor. Antes de 2018 algunas personas decían que no podía hacer nada después de dejar Chelsea, pero seguí adelante e hice grandes cosas. Creo que en cierto modo fue positivo y trato de estar en línea».
Los dichos de Salah en la primera cita hacen referencia a la final de la Champions League del 2018 disputada en Kiev, Ucrania. En aquel partido decisivo pasaron muchas cosas fortuitas en favor al Real Madrid porque fue un encuentro completamente influenciado por los errores de Loris Karius, el arquero del Liverpool. Pero además del mal rendimiento que había tenido el portero, Salah tuvo que salir a los 30 minutos del primer tiempo por una severa falta de Sergio Ramos.
El zaguero español fue a disputar una pelota dividida contra el egipcio y durante ese duelo individual, Sergio Ramos tomó del brazo a Salah y lo desplomó sobre el suelo; provocándole de esta manera una grave lesión en el hombro. Lo más destacable de esta jugada es que el árbitro serbio (Milorad Mažić) ni siquiera amonestó al futbolista del Real Madrid cuando era una falta de roja directa porque en ningún momento intentó disputar el balón. Por lo tanto, 4 años después de aquella final, Salah está preparado para tener su revancha.