Los 100 días de Luis
Desde el año 1933 la opinión pública evalúa la capacidad de los presidentes de los Estados Unidos en base a los primeros 100 días de gobierno. En la República Dominicana no ocurre lo mismo, pero, por tradición, durante el referido espacio de tiempo, el nuevo gobierno disfruta de una tregua que le brindan los partidos de oposición y la sociedad.
Los primeros cien días de un presidente empezaron a ser considerados como una etapa importante del período presidencial a partir de que el nuevo presidente, Franklin D. Roosevelt, en medio de la Gran Depresión, inició desde el primer día de su gobierno, el 4 de marzo de 1933, un irrefrenable proceso reformador, que tenía como plazo de vencimiento el día 100 del mandato, con el objetivo de reactivar la economía y sacar al pueblo de la miseria, mediante la transformación del gobierno de un órgano pequeño que tenía impacto limitado sobre los norteamericanos, en una maquinaria inmensa que llegó a casi todos los ciudadanos, como sostiene Kenneth C. Davis, en su obra Que Sé Yo de Historia.
Situaciones graves, como la creciente quiebra de bancos y el galopante desempleo, fueron detenidas con la aprobación, en los fructíferos cien días, de la mayoría de los setenta y seis proyectos de leyes y la creación de instituciones que cambiaron favorablemente el estilo de vida de los norteamericanos.
Con las exitosas medidas tomadas durante sus primeros cien días, el presidente Roosevelt comenzó a cumplirle a los estadounidenses su promesa del “New Deal”. Para alcanzar esta meta, desde marzo hasta junio, Roosevelt fundamentó su ingente carrera transformadora en tomar un método, ensayarlo y si fallaba intentar otro, lo que llevó a los congresistas al extremo de aprobar medidas extraordinarias muchas veces sin haberlas leído.
Será positivo el informe a la nación que rendirá Abinader de los primeros 100 días de
Gobierno
A partir de entonces, los presidentes son medidos por los logros alcanzados en los primeros cien días, en comparación con los del gran estadista, Franklin Delano Roosevelt.
En caso de que el presidente, Luis Abinader, consiga detener la contagiosa pandemia del COVID-19, como se espera, relanzar el turismo, reducir el desempleo y levantar la economía, partiendo de las medidas que tome dentro de los cien días que acaban de iniciarse, la República Dominicana podría llegar a tener un referente, como en los Estados Unidos, para medir desde el inicio la capacidad de los futuros presidentes.
Nunca fue tan necesario, como ahora, integrar a toda la ciudadanía en el combate contra el contagioso virus y el rescate de la economía.
Por tal motivo, para combatir exitosamente las profundas crisis sanitaria y económica que afectan al pueblo dominicano, lo más conveniente es mantener la tregua como la razón principal de los primeros cien días. De esta manera, las medidas que acaba de tomar el nuevo presidente, Luis Abinader, así como las que tome en lo inmediato, tendrán el apoyo de todos los sectores de la sociedad.
Finalmente, cuando los cien días hayan pasado, el próximo 24 de noviembre, corresponderá al presidente, Luis Abinader, rendirle un informe a la nación en torno a su gestión durante los primeros cien días del gobierno del Partido Revolucionario Moderno.
Por: Eddy Olivares Ortega
ej.olivares@hotmail.com