México trabaja en su propia vacuna contra el covid: Podría llamarse «Patria» y estar lista a fin de año
Investigadores de ese país desarrollan un inmunizante de bajo costo. Y aunque esté disponible meses después que las que ya se comercializan, creen que «disponer de una vacuna nacional es un asunto de seguridad nacional».
Junto con firmar acuerdos con farmacéuticas internacionales, México trabaja en paralelo en sus propios proyectos de vacuna contra el covid-19 y, según sugerencia de las autoridades, la que vea la luz podría llamarse «Patria».
Con menos recursos que los países que ya están produciendo vacunas en el mundo, al menos tres universidades avanzan en sus investigaciones.
Una es la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), donde aseguran ya contar con la vacuna. Mientras que el Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBm) de la UNAM, y la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo dicen que el objetivo llegar a fin de año con una vacuna lista. Las tres instituciones tienen un propósito común, que es ofrecer una vacuna de bajo costo.
Especialistas de la Universidad Autónoma de Querétaro, que trabajaban en el desarrollo de una vacuna desde mediados de 2020, declararon la semana pasada que ya cuentan con una vacuna segura, que «puede funcionar en humanos», aunque explicaron que les falta la fase clínica y la aprobación de la Cofepris. En tanto, la coordinadora de la investigación de la UNAM, Edda Sciutto, dijo hoy a EFE que «vamos más despacio en el desarrollo, porque tuvimos que adquirir muchos materiales para iniciar la investigación, lo que demoró las cosas (…)
Si conseguimos los recursos necesarios, en octubre esperamos tener una vacuna nacional». Para la experta en investigación biomédica básica, «disponer de una vacuna nacional en medio de una circunstancia como la que estamos viviendo es un asunto de seguridad nacional». México suma más de 2,13 millones de contagios y más de 190 mil muertos, siendo el tercer país del mundo con más decesos, en número absoluto.
La especialista mexicana explicó que el antídoto de la UNAM tiene un espacio de oportunidad debido a que «muchas vacunas (actuales) son para situaciones de emergencia y nuestra vacuna y otras que se desarrollan en México son para condiciones regulares».
Respecto del avance de la vacuna, detalló que después de varios meses de trabajo ya cuentan con «una proteína que utiliza el virus para entrar a la célula que ya ha demostrado su capacidad inmunogénica». Indicó que, por ahora, se ha completado la fase preclínica de toxicidad y ahora se está desarrollando la fase preclínica regulada.
Con el plan trazado, Sciutto espera que «en marzo se puedan completar los estudios» para comenzar con la fase clínica, para la cual ya se han empezado a organizar con los diferentes institutos nacionales para poder desarrollar los estudios clínicos. «Un asunto de seguridad nacional» A mediados de febrero, el Presidente de México destacó el proceso de investigación de las vacunas «Soberana 01» y «Soberana 02» que desarrolla Cuba y señaló que en México también se desarrollan proyectos para generar una vacuna, que sugirió que se llame «Patria».
Para el experto en investigación biomédica básica de la UNAM, Juan Pedro Laclette, quien participa en el mismo proyecto, el hecho de que México tenga la capacidad de crear una vacuna anticovid propia representa una «verdadera soberanía».
En la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) también trabajan en el desarrollo de una vacuna contra el covid.
El profesor investigador del Centro Multidisciplinario de Estudios de Biotecnología, Alejandro Bravo, uno de los encargados del proyecto, recordó que son necesarias «una serie de experimentaciones y de desarrollo que se deben cumplir».
Explicó que la vacuna es de las llamadas tipo «mosaico», las cuales se conforman por diferentes fragmentos de las distintas proteínas que forman al virus. «Nosotros esperamos tener, a finales del año, el prototipo con el escalamiento industrial para comenzar estudios de las fases 1, 2 y 3 exigidos por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris)», contó.
Reconoció que tanto su universidad, como la UNAM o la Universidad Autónoma de Querétaro «están haciendo un esfuerzo gigantesco» para obtener una vacuna nacional, aunque ésta salga muchos meses después de las que ya se están distribuyendo.
«El virus llegó para quedarse y están surgiendo nuevas variantes que están poniendo desafíos interesantes a las vacunas que ya están probándose. Creo que llegamos en el momento justo para contribuir en paliar esta enfermedad que afecta a todo el mundo», señaló. Bravo coincidió con Sciutto en que tener una vacuna contra el covid desarrollada en México «es un asunto de seguridad nacional».