Morera blanca: ¿cuáles son sus beneficios?
La morera blanca, de nombre científico Morus alba, es un árbol que pertenece a la familia de las moráceas. Es originario de China, pero su cultivo también se extiende por Irán, Turquía, Austria, México y Estados Unidos. A nivel medicinal, se utilizan tanto sus hojas como la raíz, la corteza y el fruto.
En particular, suele aprovecharse por sus propiedades laxantes, antisépticas, antidiabéticas y antihiperlipidémicas a través de suplementos orales, como tés, polvos y comprimidos. Se destaca por su abundante contenido de antocianinas, además de vitaminas, minerales y otros compuestos farmacológicos.
Si bien tiene múltiples aplicaciones en la medicina complementaria, muchas aún son motivo de controversia. Por ahora, solo algunos estudios científicos hablan de sus efectos contra ciertos trastornos metabólicos y problemas dentales.
Usos y beneficios de la morera blanca
De la morera blanca suelen aprovecharse todas las partes, debido a su contenido de fitoquímicos. Tal y como lo detalla una publicación en la revista Foods, las hojas, los frutos y las semillas son fuente de compuestos bioactivos:
- Proteínas.
- Fibra.
- Carbohidratos.
- Ácidos fenólicos.
- Flavonoides.
- Flavonoles.
- Antocianinas.
- Vitaminas (en especial vitamina C y A).
- Minerales (calcio, potasio, magnesio, zinc, entre otros).
Ahora bien, justamente dicha composición es la que se vincula a una serie de efectos positivos en la salud. La evidencia anecdótica sugiere que sirve como coadyuvante en casos de gripe, resfriado, tos y dolor de garganta. Además, se cree que mejora los síntomas de la artritis y de otros trastornos articulares
Sin embargo, por ahora no se han hecho suficientes investigaciones para corroborar sus efectos.
Debido a ello, su uso como suplemento herbal debe ser meramente complementario. Por ningún motivo debe sustituir los tratamientos recetados por el médico ni debe ser una opción terapéutica de primera elección.
Veamos en detalle cuáles son sus principales beneficios y qué dice la ciencia al respecto.
Control de la glucosa pospandrial
Debido a su abundante contenido de antocianinas, la morera blanca se emplea como coadyuvante para regular los niveles altos de glucosa. Se cree que beneficia la salud de pacientes con prediabetes y diabetes tipo 2.
En una revisión sistemática divulgada en Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine, los investigadores determinaron que la morera blanca puede disminuir los niveles de glucosa e insulina posprandiales, es decir, posterior a las comidas. Una de las hipótesis sugiere que los compuestos activos de las hojas de morera estimulan la secreción de insulina en el páncreas y reducen la síntesis de glucagón, lo que se traduce en niveles de glucosa más estables.
Aun así, los expertos consideran que no hay pruebas suficientes para asegurar que la morera reduce de manera eficaz la glucemia. Por ello, hacen hincapié en la necesidad de realizar estudios más amplios.
Disminución de los niveles de colesterol
Las propiedades antihiperlipidémicas de la morera blanca se destacan en la medicina complementaria por sus beneficios para la salud del corazón. Tanto las hojas, como las semillas, las raíces y los frutos, tienen antioxidantes que favorecen la disminución del colesterol en la sangre.
Con relación a esto, un pequeño estudio compartido en Phytotherapy Research informó que un extracto de hoja de morera blanca, administrado 3 veces al día antes de las comidas, fue útil para disminuir los niveles de colesterol total, colesterol malo o LDL y triglicéridos en 23 adultos con dislipidemia.
El abundante contenido de antocianinas, flavonoides y ácidos fenólicos de la planta estaría detrás de este efecto. De todos modos, son necesarios más estudios.
Prevención de problemas dentales
El potencial antimicrobiano de la morera blanca se aprovecha como complemento para cuidar la salud dental. En un estudio compartido a través de International Journal of Pharma and Bio Sciences, se expone que el extracto de la raíz puede combatir patógenos orales asociados a enfermedades de las encías.
Para ser más precisos, se observó que puede actuar sobre microorganismos como Streptococcus mutans, Lactobacillus acidophilus y Enterococcus faecalis. Así las cosas, se vincula a la prevención de enfermedades como las caries, la gingivitis y la periodontitis.
Un compuesto conocido como kuwanon G —exclusivo de esta planta— sería el responsable del efecto. Otra investigación compartida en Journal of Ethnopharmacology sugiere lo mismo.
Protección de la piel
Los fenoles, los flavonoides, los terpenos y otros compuestos antioxidantes de la morera blanca se vinculan con la protección de la piel. En particular, estas sustancias ayudan a la prevención del envejecimiento prematuro y condiciones como la hiperpigmentación.
De hecho, una investigación compartida a través de Journal of Agricultural and Food Chemistry sugiere que los extractos de Morus alba ayudan a disminuir el daño del ADN asociado al cáncer de piel. Se requieren más estudios para corroborarlo.Posibles efectos secundarios de la morera blanca
Dada la falta de investigación, no hay mucha información sobre la seguridad de la morera blanca. En pequeñas dosis se considera segura para la mayoría de los adultos sanos
De todos modos, algunas personas pueden experimentar efectos secundarios, como diarrea, mareos o estreñimiento cuando se toma en dosis altas.
No se recomienda el consumo de suplementos de morera blanca en los siguientes casos:
- Embarazo y lactancia.
- Pacientes próximos a una cirugía.
- Personas en tratamiento para la presión arterial alta.
- Personas con enfermedades crónicas. De ser así, es primordial consultar al médico.
- Personas en tratamiento para la diabetes. Un uso simultáneo con medicamentos antidiabéticos puede derivar en hipoglucemia, mareos, fatiga y desmayos.
La morera blanca se distribuye como suplemento oral en comprimidos, polvo seco o bolsitas de té. Cada presentación puede variar en cuanto a la dosis sugerida. Por eso, debe consultarse la etiqueta del producto.
El polvo suele combinarse con jugos, yogur, batidos o leche. Está disponible en extracto de la fruta, pero también de las raíces y las hojas. Esta última opción tiene un sabor un poco amargo.
Su almacenamiento ha de ser a temperatura ambiente, alejado de cualquier fuente de humedad. En caso de presentar moho o señales de deterioro, hay que desecharlo.
¿Qué hay que recordar sobre la morera blanca?
Todas las partes de la morera blanca se aprovechan con fines medicinales, debido a su abundante contenido de antioxidantes y compuestos bioactivos. Aun así, no hay suficientes estudios científicos para corroborar los beneficios que se le atribuyen.
Por ahora, sus suplementos deben emplearse solo con fines complementarios, preferiblemente supervisados por el médico. Es posible que ayude a reducir la glucosa, el colesterol alto y algunos problemas dentales. De todos modos, son necesarias más evidencias.