Sheinbaum critica a España en su toma de posesión: “La grandeza de México reside en las civilizaciones que vivían en esta tierra antes de que nos invadieran”
España ha estado muy presente en la toma de posesión de Claudia Sheinbaum como presidenta de México. Y no precisamente por la asistencia de Felipe VI, quien no estaba invitado porque no ha pedido “perdón” por “las violaciones de los derechos humanos y las matanzas de la llamada Conquista”, ni de miembros del Gobierno, que se han negado a ir por excluir al monarca. Nuestro país ha salido a colación porque, de nuevo, la nueva jefa del Ejecutivo mexicano ha criticado la “invasión española”. (Más de 500 años después).
“Agradezco la representación de 105 países que nos acompañan, es un ejemplo del compromiso de México con la comunidad internacional y de la amistad que nos une con todos los pueblos del mundo”, ha comenzado Sheinbaum en su discurso. En su mensaje ha mencionado a algunos líderes internacionales presentes. Entre ellos, Lula Da Silva, Gabriel Boric o Gustavo Petro.
Y también se ha dirigido a Josep Borrell -no como representante de España, sino de la política exterior de la Unión Europea- y a Gerardo Pisarello, diputado de Sumar. Acto seguido se ha dirigido “a muchos otros que están entre nosotros”, refiriendo así a políticos españoles como Irene Montero, Ada Colau, el diputado Javier Sánchez, el diputado de Bildu Jon Iñarrito, o la portavoz del BNG en Galicia, Ana Pontón.
Y frente a ellos, la presidenta ha dado su discurso y ha afirmado que “el origen de la grandeza cultural de México reside en las grandes civilizaciones que vivían en esta tierra siglos antes que invadieran los españoles”. Tras su posesión, según Sheinbaum, la Constitución mexicana contempla “derechos plenos para los pueblos indígenas y afromexicanos”.
La polémica estalló hace justo una semana, cuando el Gobierno de España anunció que no habría ningún miembro presente en la toma de posesión. Pero, realmente, este conflicto no es nuevo. “Casi es algo ya recurrente, como una tradición a un lado y otro del charco. Esto remite al inicio del sexenio de López Obrador, cuando envía dos cartas, una al Papa, nada menos y otra al Rey. Y ahora con la toma de posesión de Claudia Sheinbaum, pues se repite lo mismo”, aseguró Manuel Burón Díaz, profesor de Historia de América en la Universidad Autónoma de Madrid, a Infobae España.
“Es una polémica mediática, pero yo diría que no llega ni a conflicto diplomático. Es una polémica que Andrés Manuel López Obrador o Claudia Sheinbaum realizan principalmente de cara a la política interior de su país. Es una declaración de intereses para su electorado, para sus ciudadanos”, ha agregado.
En su primera intervención como presidenta, Sheinbaum ha puesto en valor los logros de López Obrador y ha prometido seguir por su mismo camino. “Hoy lo decimos con certeza y sin temor a equivocarnos, la historia y el pueblo lo ha juzgado. Andrés Manuel López Obrador: uno de los grandes, el dirigente político y luchador social más importante de la historia moderna, el presidente más querido, solo comparable con Lázaro Cárdenas el que inició y termina su mandato con más amor de su pueblo y para millones aunque a él no le gusta que se lo digan, el mejor presidente de México”, ha afirmado.
Durante su discurso, la nueva presidenta ha apuntado que se compromete a mantener los programas sociales e incluso aumentarlos en beneficio de los mexicanos. Y en concreto, ha hecho referencia a las pensiones.
También ha explicado que en breve presentará sus planes de energía y para alcanzar la soberanía alimentaria; otro de los puntos que promete priorizar es la construcción de más vías para trenes de pasajeros y de carga; asimismo, prometió ordenar concesiones, cuidar el agua y que ésta sea recurso de la nación. Otro punto es el combate a la contaminación.
La ciencia también será pilar de su gobierno, desde los primeros niveles educativos hasta los más avanzados, porque destacó que “en México somos trabajadores y creativos”.
La presidenta de México ha concluido su discurso en el Palacio Legislativo de San Lázaro prometiendo poner su vida al servicio de la Patria: “No les voy a defraudar, les convoco a seguir haciendo historia. ¡Que viva la Cuarta Transformación! ¡Que viva México! ¡Que viva México! ¡Que viva México!”, ha sentenciado. Acto seguido, el salón del pleno estalló el júbilo al grito de “¡Es un honor estar con Claudia hoy!”.