Un ataque israelí mata a trabajadores humanitarios extranjeros en Gaza
Los fallecidos eran ciudadanos de Australia, Polonia, Reino Unido, Palestina y uno tenía la doble ciudadanía de EE.UU. y Canadá.
Desde la ONG, fundada por el célebre chef hispanoamericano José Andrés, detallaron que su equipo fue atacado por las fuerzas israelíes a pesar de que «se desplazaba por una zona libre de conflicto» y coordinaba «sus movimientos con las FDI».
El convoy humanitario, formado por dos vehículos blindados con el logotipo de WCK y un camión con capota, «fue alcanzado cuando salía del almacén de Deir al Balah, donde el equipo había descargado más de 100 toneladas de ayuda alimentaria humanitaria llevada a Gaza por ruta marítima».
«Alimentos como arma de guerra»
La directora ejecutiva de WCK, Erin Gore, tachó el ataque de las FDI de «selectivo» e «imperdonable» y señaló que no fue dirigido solo contra su ONG, sino «contra las organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más espantosas donde los alimentos se utilizan como arma de guerra».
Por su parte, el chef José Andrés en su cuenta de X declaró que está «desconsolado y afligido» por la muerte «hermanos y hermanas» de la familia de WCK «en un ataque aéreo de las FDI en Gaza».
«El Gobierno israelí debe poner fin a esta matanza indiscriminada.
Tiene que dejar de restringir la ayuda humanitaria, dejar de matar a civiles y trabajadores humanitarios y dejar de utilizar los alimentos como arma».
Reacciones
Australia confirmó que uno de sus ciudadanos murió en dicho ataque de las FDI en Gaza.
«Australia espera que se rindan cuentas por las muertes de los trabajadores humanitarios, lo cual es completamente inaceptable», aseveró el primer ministro del país, Anthony Albanese, en una rueda de prensa.
A su vez, la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de EE.UU., Adrienne Watson, escribió en X que Washington estaba «profundamente preocupado» por la muerte del personal de WCK en Gaza e instó «a Israel a investigar rápidamente lo sucedido».
Por su parte, las FDI afirmaron que están «llevando a cabo un examen en profundidad al más alto nivel para comprender qué pasó y cómo pasó».
Mientras tanto, WCK detuvo sus operaciones en la zona.