República Dominicana acumula el mayor déficit fiscal en la regiónSe colocó en 4.5% de su PIB, según el BCIE. El Salvador tuvo un 2.6% y Nicaragua un 2.5%
SANTO DOMINGO, RD.- República Dominicana y los países de Centroamérica mantienen una economía con una tasa de crecimiento estable, en términos relativos. La inflación se sitúa dentro de la meta, con perspectivas favorables y finanzas públicas que avanzan hacia una consolidación fiscal.
Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Panamá, Nicaragua y República Dominicana, países miembros del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), reportaron en 2017 un déficit fiscal por debajo del 5% de su producto interno bruto (PIB).
El Informe de Coyuntura Económica y Negocios 2018 del BCIE destaca que los países deben estimular el crecimiento de largo plazo, a través de la integración económica regional y la atención de demandas sociales.
Dentro del grupo, República Dominicana ocupó el primer lugar con el déficit fiscal más alto (4.5%), seguido por El Salvador con 2.6% y Nicaragua con el 2.5% de su PIB.
Las demás naciones que pertenecen al organismo lograron un déficit menor de dos puntos porcentuales. En el caso de Panamá, fue de 1.7%; Guatemala, 1.4%; Honduras, 1.0%, y Costa Rica, al cierre de enero de 2018 registró un 0.6% de PIB.
El documento detalla que aunque la inflación dominicana se ubicó en el rango meta, la situación fiscal registró un aumento del déficit del sector público consolidado, así como un repunte de su nivel de endeudamiento (51.4% del PIB) y el crédito al sector privado registró un menor crecimiento.
Sin embargo, el documento resalta que la banca dominicana conserva su solvencia y para 2018 se espera una perspectiva de crecimiento económico de un 5.5%, debido a un repunte del crédito y condiciones externas más favorables.
En el mediano plazo persisten los riesgos a la baja y la necesidad de contar con medidas de consolidación de carácter estructural. “Si bien las reformas en marcha continúan fortaleciendo el marco de políticas, existen vulnerabilidades estructurales que limitan la capacidad de las políticas económicas de absorber choques”, señala el informe.
Según el documento, de los siete países que integran el BCIE también Costa Rica, aunque con menor déficit fiscal (0.6%), refleja una desaceleración económica.
En 2017, Costa Rica cerró con una inflación de 2.6% y el Banco Central anunció que fortalecerá su marco de política monetaria a partir de un esquema flexible de metas de inflación.
El informe detalla que Costa Rica deberá tomar medidas para encontrar una solución a la problemática estructural de sus finanzas públicas. “Aunque las acciones implementadas por las autoridades tuvieron resultados positivos, la aprobación de proyectos y reformas para el fortalecimiento de las finanzas públicas sigue siendo una prioridad”.
En el mismo período, Nicaragua presentó perspectivas favorables con una tasa de crecimiento de un 4.9%, debido al repunte generalizado en la mayoría de los sectores económicos y, en un ambiente de estabilidad de precios (5.7% inflación).
También, la economía de El Salvador continúa creciendo por encima de su capacidad.Durante tres años, la actividad económica presentó un aumento por encima de su tasa potencial (2.0%), alcanzando 2.4% en 2017.
Además, en febrero 2018, Moody’s mejoró la calificación de deuda de largo plazo, de Caa1 hasta B3, con perspectiva estable, señalando que los riesgos de liquidez se han reducido.
Guatemala fue otra nación que presentó crecimiento estable, favorecida por el dinamismo de la mayoría de sus actividades económicas, la inflación controlada y las condiciones externas.
El BCIE resalta que, aunque la recaudación tributaria es un tema pendiente de mejorar, el déficit fiscal se ha contraído en los últimos años, al pasar de 2.8% en 2011 al 1.1% del PIB en 2016, cuando el Gobierno superó el objetivo de la recaudación de impuestos.
En cuanto a Honduras, su economía mostró un firme compromiso con la estabilización y la reducción de la pobreza. Se espera que mantenga un déficit que ronde el 1.0% del PIB durante el 2018.
La significativa mejora resultó de un incremento en la recaudación fiscal y disminución de gasto público.
El comercio marítimo impulsará la economía de Panamá, específicamente debido a que por el Canal atraviesa el 5% del comercio mundial de mercancías.
Sus ingresos representan aproximadamente el 20% de la retribución del Gobierno y se espera aumento de ganancias. El déficit global de Panamá fue del 1.7% del PIB, menor al 1.9% del 2016.
Intereses por compromiso
En el período 2012-2016, en los países centroamericanos se aprecia un incremento en los compromisos por intereses, alcanzando un 0.6% del PIB. Mientras que, en términos de tasas implícitas, experimentó un incremento de 70 puntos base.
El informe del BCIE destaca que este incremento de costos se dio en un entorno en el que las principales tasas de referencia internacionales se mantuvieron bajas y en un contexto de política monetaria expansiva por parte de las principales economías en el mundo, aspecto que está en proceso de reversión, y plantea desafíos a corto plazo.